Noches de New York
La primavera ha llegado y poco a poco el calor del verano próximo se hace sentir. Salgo a la calle en la noche, pero ya no son mis noches, ahora estas son extrañas. Camino por una calle llena de grandes edificios, rodeada de gentes forasteras que van y vienen sin mirar a nadie, sin notarme. Ahora y desde hace algún tiempo camino solo, acompañado por un cigarrillo, por mis pensamientos y por la nostalgia; camino sin rumbo alguno, pero buscando un rumbo, buscando lo que he perdido, ese amor venidero que entro en mi vida sin pedir permiso y se quedo ahí. Pasare una noche más buscándola aunque sé que ella ya encontró otro, uno distinto a mí, y mi presencia solo quedara grabada en su mente como aquel mal recuerdo de alguien que la hizo sufrir.
La primavera ha llegado y poco a poco el calor del verano próximo se hace sentir. Salgo a la calle en la noche, pero ya no son mis noches, ahora estas son extrañas. Camino por una calle llena de grandes edificios, rodeada de gentes forasteras que van y vienen sin mirar a nadie, sin notarme. Ahora y desde hace algún tiempo camino solo, acompañado por un cigarrillo, por mis pensamientos y por la nostalgia; camino sin rumbo alguno, pero buscando un rumbo, buscando lo que he perdido, ese amor venidero que entro en mi vida sin pedir permiso y se quedo ahí. Pasare una noche más buscándola aunque sé que ella ya encontró otro, uno distinto a mí, y mi presencia solo quedara grabada en su mente como aquel mal recuerdo de alguien que la hizo sufrir.
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